UN VERANO DIFERENTE

No es habitual que en este blog refleje muchos de mis sentimientos, pero hoy siento la necesidad de dejarlos plasmados en un lugar cercano.
Hace mucho tiempo que el blog estaba abandonado y es que los acontecimientos de los últimos meses no me han dado mucha tregua para enredar en él, ni siquiera os desee felices vacaciones y casi casi algunos ya estáis de vuelta.

Es dificil plasmar algo personal en un blog que sabes puede leer cualquier persona por eso, reconozco que no sé ni cómo empezar:

Digamos que llevo tiempo con unos sentimientos que se tropiezan unos con otros. La tranquilidad que buscas en éstos días de vacaciones, el relax que esperas encontrar, no siempre llega y el cuerpo (bueno en mi caso la mente) me está pasando factura.
No encuentro diferencia en si el día es soleado o si está nublado, mi estado de ánimo se está basando en los rostros de la gente que me rodea estos días, en sus palabras, sus gestos, en lo que compartimos. Digamos que ... me siento defraudada, que las criticas que me están llegando han dejado de ser constructivas para ser pequeñas agujas que cuando se clavan me hacen auténtico daño.
Es dificil pasar ciertas etapas de los niños, como por ejemplo sus "sorderas temporales" o sus "rebeldias esporádicas", pero si el patrón que se establece para reducirlas se cumple ... todo va sobre ruedas. El problema viene cuando a tu alrededor te encuentras que se cede ante éstos "pequeños chantajes infantiles". ¿En qué lugar quedamos entonces, nosotros?
Últimamente hagamos lo que hagamos nosotros, todo parece estar mal. Si le regañamos está mal, si le explicamos la situación después de una de éstas pataletas también está mal, si le premiamos porque ha sido un dia o un momento perfecto, todo es poco....
Tengo la sensación de que se está invadiendo mi espacio, que la burbuja que a veces nos creamos a nuestro alrededor tiene una fuga por la que puede entrar tanto lo bueno como lo malo, sólo que últimamente no entra una mano amiga sino, un reproche, o un momento en el que tú quedas en un último plano incluso dentro de tu burbuja, ¿Cómo se ha llegado a ésto? ¿Cómo lo puedo mejorar para que me deje de afectar? ¿Conseguiré terminar el verano con una sonrisa sincera a mi alrededor? Son muchas las preguntas que me hago (que nos hacemos) éstos días, y ufff, no todas con respuestas.
Espero que en éstos días que quedan de agosoto, pueda decir que estoy disfrutando del verano, que me he relajado, espero acabar con la sensación de que ha merecido la pena pasar días malos para encontrar una gran recompensa convertida en días estupendos.