ONGI ETORRI

Volver a sentir una sensación de paz, de pura ternura, de serenidad y fragilidad, de un olor que invita a meditar y a hacer de lo pequeño algo inmenso.... Todo aquel que haya tenido la oportunidad de tener a un bebé en brazos habrá sentido estas sensaciones .... Son tan recomendables para valorar lo importante, para dejar los problemas a un lado, para entender que nadie es el ombligo del mundo sino que todos formamos parte de un puzzle mágico: el puzzle de nuestra propia vida, de la historia más importante: la nuestra y la de los nuestros, la historia de ese bebé que nos ha regalado un momento único.
Gracias pequeñajo por llegar a nuestras vidas y por dejarnos compartir contigo y con tus aitas tanta felicidad. Qué grande eres y qué frágil a la vez.
Si nos dejas, seguiremos tus pasos, te disfrutaremos con cada sonrisa, con cada cumpledias, cumplemes, cumpleaños ... ayudaremos a tus aitas,  y les apoyaremos con cada decisión, con cada piedra, y celebraremos cada logro, cada descubrimiento.
Sin tú saberlo has llegado en un momento único, en un año especial, aportándonos ilusión, esperanza y dándonos ganas de seguir soñando. Mila esker txikitxu.