DIARIO DE ANA FRANK

 

Un pedacito de historia, una obra sin filtro, una realidad vivida y narrada en primera persona.

Alguna vez has pensado qué harías tú si tuvieras que vivir escondida?? Si tu silencio valiera más que tu propia existencia?

Difícil de explicar qué haríamos en esa situación, difícil saber en qué ocuparíamos el tiempo.

Ana desde su madurez forzada nos cuenta su día a día durante los dos años de encierro.

Sorprende su madurez, su pensamiento crítico para con los demás y para con ella misma. 

Ni un día dejó de cultivar su cultura, siguió sus estudios, compartió con los demás escondidos sus aficiones, creció como chica hermosa, encontró una amistad especial, se estremeció con su primer beso y sobre todo no dejó de soñar.

Sin esos sueños, sin esas ganas de seguir viviendo... seguro hubiera abandonado a su cabeza a su suerte.

Tristeza, impotencia, locura por no poder salvarla. Dios la acompañó, sí, pero hubo quien no escuchó ni tuvo en cuenta lo más valioso que tenemos: la libertad, la esperanza, la vida. 

Su vida acabó como la de muchos otros compatriotas pero nos ha dejado un legado único, su fortaleza, sus ganas, su valentía, su vida, sus secretos más íntimos.

Ojalá su diario siga recorriendo el mundo, no dejéis de abrir la puerta de vuestra casa y dejar que entre Ana. 

Aprenderéis mucho de ella, vuestro día, cada amanecer y cada anochecer será desde ese momento, algo especial.

Cada ruido será... El ruido. Cada patata, cada fresa, cada detalle en fechas señaladas será Inolvidable.

No dejéis de soñar, no dejéis de sonreír y no dejéis de aprender. La cultura nos une y si aquellos que decidieron acabar con la vida de Ana hubieran tenido un poquito más de cultura, de sensibilidad y de amor por el ser humano, seguro hubiéramos podido disfrutar de muchas lecturas firmadas por una gran escritora: Ana Frank.