LOS AÑOS DEL SILENCIO

 


Cruel final, triste destino de una familia que vivió en una época en la que sentir, creer y amar era difícil. Complicado hacerse un hueco amable en un pueblo en el que cada casa, cada ventana y cada vecino juzga al de al lado.
Una época en la que los miedos se hacían fuertes y le podían a la razón, generando equívocos, rencillas y tristes e inesperados finales.
Una familia trabajadora, una familia con la alegría de siete hijos, de sus sonrisas que repentinamente se ve sumida en el más triste y cruel final.
Un padre que no sabe mostrar sus sentimientos, pero que sabe que los tiene, que están ahí y que al final de sus días consigue sacarlos afuera, consigue decir ésas palabras que a veces tan adentro guardamos: te quiero.
Dura lucha la de un hijo que sufre sabiendo el desenlace de una noche de verano que acabó con la familia que él quería, respetaba y añoraba. Difícil su día a día sin oír la voz de la justicia.  Una justicia que llega tarde pero que llega, y que gracias a esas voces que no cesaron en su empeño de buscar la verdad, hoy conocemos lo sucedido con la familia Sagardia. 
Y ahora me pregunto, cuántas vidas se truncaron en esos difíciles años? Cuántas familias fueron cruelmente separadas? Cuánto daño ha echo el poder mal ejercido, el poder de quién se cree superior a los demás.
Cuántos pueblos, cuántos vecinos pudiéndose llevar genial han sido privados de una buena amistad, de una sana convivencia. 
Todo marcado por un régimen equivocado, por un régimen y una guerra que nunca debiera de haber existido. Una guerra inútil entre iguales, una destrucción de la libertad.

Comentarios

Entradas populares