Amigos

Creo que llegada a ésta etapa de mi vida puedo afirmar, en parte con tristeza y en parte con nostalgia, que no he sido afortunada en la busqueda de amigos. La esperanza sigue estando viva en mi, pero la realidad a veces, duele y cómo duele.
Cuando era pequeña, mi aspecto físico dio pie a que la crueldad e imaginación de mis compañeros flotara. Así que mis kilitos de más y el uso de gafas y de aparato dental provocaron en mí busquedas frustadas de buenos amigos.
Dicen que no hay que esperar sentado a que los acontecimientos lleguen, por eso, y gracias a mi personalidad disfruté de mi niñez y adolescencia compartiendo aventuras y grandes recuerdos en clubs de tiempo libre, con mi familia e intentando ser valorada por algo más que por mi físico dentro de las aulas.
Fui feliz, no guardo mal recuerdo de ésa etapa, pero hoy echo de menos ésa falta de buenos amigos de los que tanto habla la gente.
De todos aquellos con los que compartí algún momento de mi vida, guardo los buenos momentos y si nos encontramos de nuevo, hablamos y nos sonreimos porque de alguna manera formamos parte de nuestras vidas.
Al finalizar la adolescencia, me encontré rodeada de varios grupos de amigos, con los que aprendí y viví muchas emociones, algunas buenas y otras no tanto gracias a las cuales mi personalidad se ha visto reforazada y mis sentimientos e ideas se han vuelto claras y concisas.
Con todas éstas personas se puede decir que tengo relación similar. El paso del tiempo hace que nos recordemos y que cuando surge la oportunidad de vernos entablemos ésas conversaciones que a veces se echan de menos. Nos contamos cómo nos va, en qué andamos envueltos en el presente y las novedades que nos llegan de conocidos mutuos siempre nos aportan alegría. Ha sido facil perder la pista de algunos ...
Pero todo queda ahí. A veces me recuerda a las típicas reuniones de antiguos alumnos que se organizan o de éste tipo de quedadas.
Ahora puedo decir que estoy en una etapa madura, con seguridad y tranquilidad.
Dicen que el echo de ser madre te cambia por dentro y por fuera. Es verdad, por fuera son meros cambios físicos que en ocasiones dejan entrever la felicidad de ser madre.
Por dentro, los cambios en mi caso han sido más importantes. Mis expectativas, preocupaciones y sentimientos han dado un giro a mi vida, a parte de mi pesonalidad y a mis sentimientos. Me han aportado una seguridad y una confianza que me hacen sentir bien. También me ha echo, echar la vista atrás y descubri situaciones, personas y sentimientos con los que a veces tengo que lidiar para evitar sentir ésa tristeza y ésa nostalgia que mencionaba al principio.
A veces pienso que los buenos amigos no existen. Cada persona que conocemos y cada amigo que cuenta con nosotros y con el que compartimos un momento de nuestra vida, considero que llegan a nuestra vida por una casualidad anunciada.
Cada uno, tenemos una función para con alguien, de manera especial, en momentos de alegría o en momentos de pena llegamos y aportamos a nuestras vidas esa experiencia que siempre recordamos.
Así me siento yo ahora, teniendo conocidos y buena gente con la que me reuno y me siento bien, con la que comparto momentos y emociones, a las que ofrezco lo que la situación y el corazón me dice.
Pero la expresión de buenos amigos, mi mejor amigo ... ¿existirá? La esperanza es algo que yo no pierdo, los complejos que pudieron truncar momentos importantes de mi infancia no lo han conseguido y ahora gracias a mi personalidad abierta, alegre, soñadora, cariñosa, atenta, creativa .... consigo sentirme bien con quién yo eligo y con quien llega a mi por esa casualidad anunciada que te aporta tanto.
Sólo que a veces, esa fortaleza que demuestra mi personalidad y la seguridad con la que expongo mis ideas, se afloja, queriendo o necesitando sentir algo más.
Y es cuando me pregunto: ¿Doy mucho o será poco? ¿Que esperan los demás de mi compañía, de mi amistad? ¿Recibo poco? A veces llega a mi cabeza una necesidad de algo, de un detalle, de un momento que haga que me sienta feliz.
Y soy feliz, pero siento que tengo un vacío para llenar con amigos. Quizá esté llegando a otra nueva etapa, en la que las necesidades cambien, las fortalezas se debiliten o quizás en donde encuentre ése algo que hoy necesita mi corazón.

Comentarios

  1. Si me permites, te diría que se sabe que se tiene amigos, en los peores momentos, ya que cuando todo va bien siempres hay "amigos".
    No crees?
    Decirte que hay gente que presume de tener muchos, yo prefiero uno que muchos, ya que a veces confundes el termino amigo por simplemente conocido.
    Bueno decirte que ante todo me encanta tu blog y te seguiré.
    BESOS ....

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares